Aprende A Disfrutar La Vida

Día 40
Para Aprender A Disfrutar La Vida…
Es Importante Que Veas Que La Vida Es Un Maratón

¿Qué diferencia hay entre una carrera de 100 metros planos y un maratón? ¿Por qué el día de hoy te digo que la vida es un maratón y no una carrera de 100 metros?

(1) La carrera de 100 metros se debe correr desde el principio a toda velocidad, acabar con todo lo que tienes en un momento. Muchos corren en la vida así, se la quieren acabar en su juventud, sin darse cuenta que la vida no son sólo los 20 o 30 primeros años de tu vida. Ejemplos: quienes se hacen novios, y están celebrando el primer aniversario de una semana de novios y entonces se regalan un mega osote y entonces ¿qué pasará en el siguiente aniversario de dos semanas? ¿Con qué se sorprenderán si ya corrieron antes de tiempo? Las parejas que deciden tener sexo antes de casarse, están corriendo todo para que cuando se casen ya no tengan reservado nada para el matrimonio (aunque algunos le reservaron la posibilidad de meterse con alguien más y por eso la mayoría acabó mal). Quienes deciden vivir su juventud sin pensar en el mañana, se vuelan las clases para disfrutar; se envician con alcohol, cigarros o drogas; creen que no necesitan a mamá o papá ni sus consejos; quieren antrear y llegar en la madrugada a su casa sin siquiera haber cumplido la mayoría de edad; descuidan sus estudios por querer disfrutar. Todo esto repercute a la mitad del maratón de la vida: comienzas a desinflarte sin salud, con heridas en el corazón, con enfermedades, y quizás sin la posibilidad de un buen trabajo, etc.

(2) Un maratón se corre lentamente al principio, para apretar a la mitad de la carrera y soltar todo lo que queda al final. Y así es la vida, se debe comenzar lento, con pasos firmes: una relación, un trabajo, etc. Porque a diferencia de la carrera de 100 metros, el maratón ofrece muchos obstáculos, requiere de mucha perseverancia porque habrán momentos en que parece que la meta es inalcanzable ya que no se ve hasta después de ¾ partes de la carrera. ¿Eres de los que se rinden fácilmente? Entonces necesitas recordar que aunque hay momentos difíciles, la meta sigue al frente: pon la mirada en Jesús, Él enfrentó un maratón bastante doloroso, y aún así llegó a la meta por amor a Ti, para que tú ahora puedas llegar al final de tu carrera para disfrutar una vida plena y abundante. No te sueltes de su mano, Él está a tu lado durante toda la trayectoria, animándote, advirtiéndote de obstáculos, pasándote esponjitas con agua y a veces levantándote cuando tropiezas.

Así que dile hoy al Señor: Dios, cuando la vida es difícil, me he visto tentado a renunciar, ayúdame a no hacerlo. Señor, cuando la vida se vea demasiado fácil, ayúdame a no correr demasiado rápido, sino a caminar con pasos firmes y seguros. Cuando me sienta débil, sé Tú mi fuerza. Sea en las buenas o en las malas, ayúdame a confiar en que Tú estás a mi lado. En el nombre de Jesús. ¡Amén!

Perseverar con paciencia es lo que necesitan ahora para seguir haciendo la voluntad de Dios. Entonces recibirán todo lo que él ha prometido (Hebreos 10:36)

Comentarios

Los más leídos