Es Que Es Tan Difícil
¿Por qué será que cuando quieres hacer las cosas bien, todo se pone más difícil?
Descubre los beneficios de actuar siempre de acuerdo a la voluntad de Dios
He practicado el juicio y la justicia; No me abandones a mis opresores. (Salmos 119:121)
No sé si te ha pasado, pero a mí sí. Cada vez que me decido a hacer las cosas bien, todo se pone más difícil. Si decidía echarle muchas ganas a la escuela, no faltaban los amigos que me invitaban a volarnos las clases. Si decidía estudiar para el examen, no faltaban los que me recordaban que esa noche iba a ser la mega party. Si decidía ya no decir mentiras, venía la nota que tenía que firmar mis padres porque o había salido mal en una materia o por faltas de tarea, o pidiéndo que llegaran a junta con el maestro porque era urgente hablar con ellos. Pero lo más feo es que cuando hago las cosas correctamente, no faltan aquellos que se pelean contigo, que te ofenden, que se burlan, te llaman ñoño(a), santurrón, monja, aburrido, mojigata, etc, etc. ¿Te ha pasado?
Es que hacer lo correcto no es fácil. Porque cuando te comprometes a obedecer al Señor, te enfrentarás a aquellos que no ven las cosas como tú las estás viendo. Pero recuerda que el Señor ama la justicia, así que no te preocupes por los que te acosen, porque Dios siempre estará del lado del que practica la justicia. En pocas palabras, siempre estará de tu lado.
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Bendiciones!