En las buenas y en las malas

En las buenas y en las malas
¿Por qué el Señor permite que me pasen cosas malas? ¿Qué de bueno puede traer a mi vida esta situación que estoy pasando?
Descubre cómo Dios provee y te cuida tanto en las buenas como en las malas

Y sabemos que para los que aman a Dios, todas las cosas cooperan para bien, esto es, para los que son llamados conforme a Su propósito. (Romanos 8:28)

Todos pasamos por momentos difíciles. Y seguramente te has preguntado lo mismo que yo: ¿Por qué el Señor permite que esto me pase a mí? Y seguramente te has topado con personas bien intencionadas que te dirá: “Es parte del plan de Dios”.

La verdad, las primeras veces que escuché eso me resultaba tan frustrante, en vez de darme consuelo me frustraba. ¿Por qué Dios, que me ama, quiere que experimente dificultad en mi vida? ¿Qué plan tan raro?
El problema es que la mayoría de los Cristianos cree que sufrir significa que algo anda mal contigo, y que solo el placer puede venir de Dios. Pero la realidad es que esto no es del todo cierto.

Estoy seguro de que existe un platillo o una comida que te fascina, pero sin duda la odiarías si tuvieras que comer lo mismo todos los días, y muy probablemente sufrirías de desnutrición por falta de alimento balanceado. Algo así también sucede con algunas enfermedades como la tos, que nos permite sacar ciertas impurezas que se acumulan dentro del cuerpo, pero además será por un breve momento y el resto del año seguiré saludable.

Pero sobre todo, Dios desea que aprendas a satisfacer tus necesidades en Él. Todo en este mundo te puede defraudar, pero Dios nunca te defraudará. Así que en esos momentos tan difíciles, tú puedes confiar en que Él hará que aun esto tan malo resulte para algo bueno en tu vida.

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