Mujer, Ora por tu esposo

¿Vivir con él ya es imposible? ¿Me resulta insoportable? ¿Sólo por mis hijos aguanto? ¿Me parece que puede ser el indicado, lo amo, pero no sé, tiene muchos defectos?

Cómo hombre debo admitir que nuestros muchos errores las llevan a ustedes a tener estos pensamientos. ¿Qué puedes hacer? ¡Ora! ¿Por qué?

Al orar, diriges tu mirada hacia Dios. 
El perder de vista a Dios es lo que nos puede llevar a perder de vista todas las bendiciones que nos ha dado y dirigirnos al pecado (como lo hizo con Eva y Adán). El perder de vista a Dios es lo que puede hacernos titubear en nuestra fe y dejar de caminar sobre el agua (como le pasó a Pedro).

Al orar, te concentras nuevamente en el Señor, y sin duda te ayudará a ver, al principio, que "no todo es tan malo en tu esposo"; luego te ayudará a ver la bendición tan grande que él es para tu vida.

¿Parece que has encontrado al amor de tu vida? ¿Deseas o necesitas enamorarte nuevamente de tu esposo? ¿O quizás por primera vez enamorarte de él? ¿Estás recién casada? ¿Quizás ya llevan años de casados? Bien, pues es tiempo de comenzar a orar.


1. Da Gracias
Esta no es una oración a favor de tu esposo, más bien es a tu favor. Una de las formas que el enemigo ataca en un matrimonio es dirigiendo sus miradas y sentimientos hacia las diferencias, haciéndoles creer que son motivo para terminar. Pero la Biblia nos revela que hombre y mujer son diferentes. Así que lo primero que debes hacer al orar por tu cónyuge es: Dar gracias a Dios por ponerlo en tu vida. El Señor sabe lo que está haciendo con tu esposo. Descubrirás que esas cosas que te vuelven loca serán las fortalezas que te ayudarán en tu debilidad. Los rasgos que aparentemente son "debilidad", Dios las convertirá en fortalezas. Los hará complementarse. Pide que sea Él quien los una. Da gracias por ponerlo en tu vida.

2. Que proteja la relación
El Señor te ha dado a tu esposo, y a tu esposo lo ha dado contigo. Pero el adversario desea deshacer está hermosa unidad que se ha formado entre ustedes (tal como lo hizo con Adán y Eva). Pide que el Señor bendiga esta unión. Descubrirás, de hecho, que Él está más interesado que tú, en que esta relación funcione. Pide que mantenga el corazón y los ojos de tu cónyuge enfocados en ti. Que quite toda tentación. Que detenga cualquier pensamiento que lo aleje. Que sea un muro alrededor de ustedes. Recuerda que con Él en medio de ustedes, podrán enfrentar y vencer cualquier adversidad. No olvides que el Señor está moldeando la vida de tu esposo.

3. Que el Señor sea su fuerza
Solo por si no lo has notado, tu esposo se cansa más fácilmente, o se queja mucho más acerca del cansancio. Pídele al  Señor que cuando se cansé y se sienta derrotado, sea Él su fortaleza. Que renueve su espíritu con Su Espíritu Santo. Que desde que despierte hasta que vuelva a dormir le de lo necesario para ser el esposo, padre, empleado y amigo que Él quiere que sea. Que siempre le motive a seguir adelante y que lo bendiga cada día. Hazle saber a tu esposo que no está solo, que el Señor está de su lado, pues tú oras cada día para que le acompañe.

4. Que sea el Señor su primer amor
Tienes que saber que para que tu esposo te ame verdaderamente, él debe amar a Jesús por sobre todas las cosas. Pide al Señor que le enamore, que le hable a su corazón. Que le ame con tanta fuerza, que no tenga necesidad de buscar "amor" por otra parte. Pide que el Señor sea su todo.
 
5. Pide que le permita verte a través de Sus ojos
¡Aceptémoslo!, no sólo el hombre hace la vida imposible. Tú también tienes tus días y vivir contigo no es siempre divertido. Cuando hay dificultades o circunstancias adversas todo puede ponerse muy mal. Pide al Señor que le de a tu esposo un corazón como el suyo para poder tratarte como Él te trataría. Que le permita a tu esposo, tal como Dios te ve. Y cuando se sienta frustrado, sea saturado con paciencia. Y pide además, que haga lo mismo contigo.
 
6. Pide que lo mantenga a salvo
Dile al Señor cuanto amas a tu esposo. Pide que te ayude a hacer una vida con él, envejecer con él, abrazar a los nietos. Así que pide que lo traiga a salva a casa. Que camine delante suyo, manteniéndolo a salvo física, emocional y espiritualmente. 

7. Finalmente, pide al Señor que bendiga su trabajo
Reconoce el trabajo duro y esfuerzo que realiza tu esposo. No olvides que como hombre, las obligaciones nos abruman. Pide que el Señor le ayude a mantener su papel de proveedor y protector del hogar, tuyo y de los hijos. Que el Señor fructifique su esfuerzo, que produzca ingresos para el hogar y pueda así sentirse valorado tanto en el trabajo como en casa. Pídele que pueda ver su trabajo como esa bendición tuya, que pueda amar su trabajo o que el Señor le consiga uno nuevo, donde Él quiera que esté. Pide al Señor que lo bendiga mientras está en el trabajo. Y que le ayude a ver que estando allí, siendo luz, está marcando la diferencia.