Acerca del suicidio 2

Elementos comunes en un suicidio

No hay una manera simple de explicar o comprender todo comportamiento autodestructivo. Pero, haciendo uso de lo que hasta ahora se conoce, me gustaría compartirles lo que Edwin Shneidman, psicólogo clínico y eminencia en cuanto a comportamientos suicidas, ha descrito como 10 características comúnmente asociadas con suicidios. Conocerlas, sin duda, nos ayudará a entender muchos de los casos de suicidio.

1. El propósito común del suicidio es encontrar una solución
Para la persona que está considerando terminar con su vida, el suicidio representa una respuesta para algún tipo de problema sin solución o una forma de salir de un dilema insoportable. Representa una opción que le resulta preferible por sobre el conjunto de circunstancias tan temidas, al estrés emocional, a la imposibilidad o invalidez, a los cuales la persona le teme más que a la muerte misma.

Esta atracción hacia el suicidio como una posible solución es mayor cuando existe un historial familiar de conductas similares, ya que si alguien a quien admira o era cercano cometió suicidio, entonces es posible que esta persona procure hacer lo mismo.

2. La meta común del suicidio es el cese de conciencia Quien comete (o intenta cometer) suicidio, busca terminar con la experiencia conciente, ya que para ellos se ha convertido en una corriente interminable de pensamientos angustiantes con los que están preocupados. El suicidio ofrece olvido.

3. El estímulo común en el suicidio es el dolor psicólogo intolerable
Las emociones negativas insoportables, las cuáles incluyen vergüenza, culpa, ira, miedo y tristeza, con frecuencia sirven como la base para un comportamiento autodestructivo. Las fuentes de estas emociones son diversas.

4. El factor estresante común en el suicidio son las necesidades psicológicas frustradas
Las personas con altos estándares y expectativas son especialmente vulnerables a las ideas de suicidio cuando el avance hacia tales objetivos se ve repentinamente frustrado. Las personas que atribuyen el fracaso o la decepción a sus propias deficiencias pueden llegar a verse a sí mismas como indignas, incompetentes o no merecedoras de amor. En los adolescentes, los problemas familiares suelen ser una fuente principal de frustración, mientras que las dificultades en el trabajo o interpersonales con frecuencia precipitan el suicidio entre los adultos.

5. La emoción común en el suicidio es la desesperación-desesperanza.
Un sentido generalizado de desesperanza así como expectativas pesimistas sobre el futuro, es aún más importante que otras formas de emociones negativas, como la ira y la depresión, para predecir el comportamiento suicida. La persona suicida está convencida de que no se puede hacer absolutamente nada para mejorar su situación; que absolutamente nadie más le puede ayudar. 

6. La actitud interna común en el suicidio es la ambivalencia
La mayoría de las personas que contemplan el suicidio, incluidos aquellos que eventualmente se suicidan, tienen sentimientos ambivalentes sobre esta decisión. Son sinceros en su deseo de morir, pero al mismo tiempo desean vivir y poder encontrar otra forma de salir de su dilema.

7. El estado cognitivo común en el suicidio es constricción (limitación)
Los pensamientos y planes suicidas se asocian frecuentemente con un patrón rígido y estrecho de actividad cognitiva que es comparable a la visión de túnel. La persona suicida es temporalmente incapaz o no está dispuesta a participar en comportamientos efectivos de resolución de problemas y puede ver sus opciones en términos extremos, todos o nada. Los lemas como "muerte antes del deshonor" pueden tener cierto atractivo emocional, pero no proporcionan una base sensata para tomar decisiones sobre cómo llevar su vida.

8. La acción común en el suicidio es escapar
El suicidio proporciona una forma definitiva de escape a las circunstancias intolerables, que incluyen la autoconciencia dolorosa.

9.   El acto interpersonal común en el suicidio es la comunicación de intenciones Uno de los mitos más dañinos sobre el suicidio es la noción de que las personas que realmente quieren suicidarse no hablan de ello. La mayoría de las personas que se suicidan han contado a otras personas sobre sus planes. Muchos han hecho gestos suicidas anteriores. Al menos el 80 por ciento de los suicidios completados, las personas proporcionan pistas verbales o de comportamiento que indican claramente sus intenciones letales.

10. La consistencia común en el suicidio es el de patrones de enfrentamiento de por vida.
Durante la crisis que precipita los pensamientos suicidas, las personas generalmente emplean los mismos patrones de respuesta que han usado a lo largo de sus vidas. Por ejemplo, las personas que se han negado a pedir ayuda en el pasado probablemente persistan en ese patrón, aumentando su sensación de aislamiento.

NOTA para los creyentes, líderes, pastores, ministro cristiano
¿Por qué deberías conocer lo que acabas de leer?
Para poder ayudar a alguien en necesidad, es menester conocer lo máximo posible acerca de su situación. Recordemos a Pablo, quien para ayudar a los griegos, primero observó bien su comportamiento, incluso exploró las filosofías y hasta citó escritos de algunos autores griegos (Hch 17:16-34). Sabía que una forma de ser más efectivo para presentarles el evangelio, era conociendo sus problemas y sus necesidades.

Así mismo, si tú y yo queremos ser de utilidad para nuestros adolescentes (y cualquier persona que está batallando con comportamientos autodestructivos), obvio que lo primero es pedirle al Señor que use tu vida, tus palabras, tu persona; pero la parte que a ti y a mí nos corresponde es: conocer acerca de la problemática, en este caso, lo referente al suicidio.