Una Aventura Inesperada



Era un hobbit como cualquiera en la Comarca, que gustaba de comer, salir a su jardín, fumar su tabaco apaciblemente y dormir. Hasta que un día, un mago apareció a la puerta de su casa para hacerlo parte de una aventura inesperada. Sería parte de un grupo conformado por 13 enanos y él sería el valiente y experimentado saqueador. La misión de este grupo era llegar a Erebor (la antigua ciudad de los enanos), derrotar al dragón Smaug y así recuperar el reino y su tesoro. 

¿Por qué un mediano? ¿Por qué No un guerrero asombroso o temerario? Bilbo, el hobbit, no se consideraba ni valiente ni experto saqueador. Los enanos consideraban que era un error llevarlo, y hasta los guardianes de la tierra media se preguntaban ¿por qué él? Gandalf, el mago, le responde a Galadriel (una reina elfa miembro del grupo de ancianos guardianes) de la siguiente manera: Porque he aprendido que la maldad se aleja con PEQUEÑAS bondades cotidianas.

Esta historia escrita por JRR Tolkien me recuerda a un personaje en la Biblia, que vivía en una época en la que la nación de Israel era oprimida por los madianitas y estos llegaban en numerosas manadas de camellos a robar todo cuanto producía la tierra. Por eso los israelitas morían de hambre. (Jueces 6:1-6)

Gedeón se encontraba trillando a escondidas cuando se le apareció un ser maravilloso, un ángel de parte de Dios para saludarle: ¡Guerrero Valiente! Y por si fuera poco le dice: ¡Ve a rescatar a Israel de los madianitas. ¡Plop! Una aventura inesperada. (Jueces 6:13-14)



Pero esa aventura requería de parte de Gedeón:

1) Entender que Dios tiene un propósito para él (Jueces 6:14-16). Gedeón se consideraba poca cosa, era imposible que él estuviese destinado a algo grande. Al igual que Gedeón, tú debes entender que hay un propósito grande del Señor para ti, así seas el más pequeño de los pequeños. Dios te formó para grandes cosas.

2) Acabar con la idolatría de su familia (Jueces 6:25-31). Gedeón fue instruido a destruir los altares que su padres había levantado. Gedeón fue motivado a no continuar con las tradiciones de idolatría de su familia. Tú también debes terminar con aquellas tradiciones familiares que te mantienen lejos del Señor, seguramente te ganarás la molestia, las burlas e incluso el rechazo de muchos, pero considera lo siguiente: El resultado de lo que hizo Gedeón, fue que sur padre pudo abrir sus ojos entendiendo que Baal no era Dios, incluso enfrentando a quienes querían lastimar a su hijo Gedeón. Tú puedes ser el instrumento de Dios para acabar con aquellas tradiciones familiares que los alejan del Señor.

3) Tomar valor para enfrentar la adversidad a la manera de Dios (Jueces 7:1-7). Debemos entender que las pruebas se enfrentan a la manera de Dios, y es que muchas veces queremos que todo vaya de acuerdo a nuestra voluntad, sin darnos cuenta que en las pruebas, casi siempre, el Señor desea que las enfrentemos en austeridad (300 en vez de 10,000 soldados), para que pueda EL enseñarnos que está a favor de nosotros.

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