Aprende A Disfrutar La Vida

Día 92
Para Aprender A Disfrutar La Vida…
Permite Que Dios Te Dirija

¿Por qué es tan difícil poder confiar en Dios para que dirija nuestras vidas? ¡Porque es más fácil creer en lo que vemos o sentimos! Eso nos hace sentir cómodos, nos da cierto sensación de tener el control de las cosas. Es por ello que nos resulta más fácil ser dirigidos por la plebe, por lo que hace “todo mundo”: “como todos los novios tienen sexo, también yo lo haré”, “como “como todo mundo se está declarando bi, yo también lo haré”, “como todos se van a volar la clase, yo también lo haré”, etc. En primer lugar “todo mundo”, en realidad no significa todos, porque si tú no lo has hecho es porque no todo mundo lo hace. Segundo, porque la mayoría lo haga no significa que está bien, que es lo correcto o que es lo más conveniente para ti.

Otro problema es que a veces permitimos que nos dirijan nuestras emociones o deseos (y a veces los deseos de los amigos o de tu pareja) y terminamos peleándonos con nuestros padres, alejándonos de nuestros amigos, reprobando, sufriendo con un corazón roto, y algunos hasta siendo padres o con alguna enfermedad, etc., en otras palabras, terminas siendo una persona totalmente diferente a quién eres en realidad.

Permite que sea Dios quien dirija tu vida. Él te dará fortaleza para enfrentar cualquier situación, te dará el valor para enfrentar cualquier prueba, y la sabiduría para vivir plenamente. Al principio cuesta porque no lo ves y tampoco lo sientes, pero si Tú pides su guía y dirección, llegarás a notar que Él habla muy claramente y tendrás la certeza de que el siguiente paso que des, es el correcto.

Recuerda esto: los planes de Dios es hacerte crecer poco a poco en sabiduría, para que cuando llegues a las encrucijadas de la vida, tú sepas qué decidir.

Hoy dile al Señor: Querido Dios, gracias por Tu Presencia y Tu amor. Quiero acercarme a Ti pidiéndote que me guíes, he tomado muchas decisiones y caminos que me han asustado y en los cuáles me he lastimado, ya no más. Quiero caminar cerca de Ti, que dirijas mis pasos desde hoy y para siempre. En el nombre de Jesús. ¡Amén!

El Señor Soberano me ha dado sus palabras de sabiduría, para que yo sepa consolar a los fatigados. Mañana tras mañana me despierta y me abre el entendimiento a su voluntad. El Señor Soberano me habló, y yo lo escuché; no me he rebelado, ni me he alejado. (Isaías 50:4-5)

Comentarios

Los más leídos