Amando Al Enemigo

Amando Al Enemigo
¿Será difícil amar a las personas? ¿Será aún más difícil amar a los enemigos, a aquellos que te causan daño, que procuran tu mal, que hablan contra ti?
Descubre porque el Señor Jesús dijo: "Amen a sus enemigos"

»A los que están dispuestos a escuchar, les digo: ¡amen a sus enemigos! Hagan bien a quienes los odian. Bendigan a quienes los maldicen. Oren por aquellos que los lastiman. (Lucas 6:27-28)

En Contiendas políticas Es tan común ver a los candidatos tratando de convencer a los votantes no hablándonos de su BUEN programa de gobierno, sino buscando información o cualquier cosa que pueda desacreditar a los otros candidatos. De tal forma que llegar a la silla no es por el proyecto que ofreció, sino porque fue el menos peor de todos.

Estoy seguro que si algún hombre debió hacer eso para llegar al gobierno, ya que el anterior gobernante era de lo peor, era un rey de Israel llamado David. Éste joven había sido ungido (tuvo el dedazo de parte de Dios) para ser el próximo en el trono (la silla presidencial), ya que el rey que estaba gobernando, Saúl, había sido desechado por Dios, debido a su desobediencia.

David estuvo al servicio de Saúl, hasta que este comenzó a sentir celos y entonces comenzó a buscar la manera de dar muerte a David, incluso llegó a perseguirlo él mismo. David, en vez de publicarlo en su Twitter o Face para desacreditar al rey Saúl públicamente, hizo algo realmente extraño: hulló. David no respondería con odio, rencor, ira, o procurando la muerte de Saúl. Él sabía que era mejor como persona, además que sabía que Saúl, había sido puesto (ungido) por el Señor como Rey, y que no sería rey hasta que Dios mismo lo sacara. Pero eso, no sería por su propia mano, sino la mano de Dios, así que mientras Saúl estuviera con vida, seguía siendo rey y autoridad sobre David.

Por otra parte, Saúl en su época de NO locura, en los tiempos en que no ambicionaba el poder, había sido un excelente rey, había traído liberación al pueblo de Israel. Además que había tenido muchas atenciones hacia David, lo había llevado a palacio, había permitido esa hermosa amistad con su hijo Jonatán. En pocas palabras, David se fijaba más en lo bueno de esa persona, que en lo malo. Tenía quizás la esperanza, de que un día Saúl volviera en sí, y fuese el mismo de antes.

Incluso, el día que recibió la noticia que Saúl había muerto, no se alegró. Le mortificó saber que el rey Saúl había muerto. Pudo ser su enemigo, pero David se fijaba en el buen hombre que fue, en todo lo bueno que esta persona tenía. Incluso en el momento de duelo, David escribió lo siguiente: "Saúl y Jonatán, amados y queridos".

¡¿Cómo?! Saúl, su enemigo, amado y querido. Es que David, aún teniendo razones para no amar a Saúl, decidió amarlo. Porque en su mente se enfocó no en lo malo, sino en lo bueno que había sido Saúl.

Es difícil, pero es lo que Jesús pide a nosotros: ¡Amen a sus enemigos! En otras palabras nos pide Que aprendamos a hacer a un lado, la herida, el golpe, la traición, la ira que puede provocarnos una acción de alguien hacia nosotros, y enfocarnos en lo positivo de esa persona (y más si es un enemigo declarado). Aprende a tratar a los demás por lo que son, criaturas con la imagen y semejanza de Dios, no por lo que crees que son cuando te han lastimado.

Comentarios

Los más leídos