Es Una Cuestión De Ser

Es Cuestión De Ser
¿Ser o no Ser? ¿Ser o Hacer? ¿Qué es esto de ser cristiano?
Descubre en qué consiste la nueva vida que has recibido

De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura (nueva creación) es; las cosas viejas pasaron, ahora han sido hechas nuevas. (2 Corintios 5:17)

Quizás te ha pasado lo que a mí me pasó, quizás estás creyendo lo que por mucho tiempo creí: que el cristiano es simplemente una persona que recibe el perdón de sus pecados, que se irá al cielo, que recibe al Espíritu y que recibió una nueva naturaleza. ¡Pero no es así! El cristiano no es solamente alguien que obtuvo algo, se trata de alguien diferente. No se trata de lo que has recibido como hijo de Dios, se trata de que ahora eres alguien totalmente diferente, alguien que no existía, un hijo de Dios, un santo, una pieza divina e importante del Cuerpo de Cristo, un hijo de luz, un ciudadano del cielo viviendo en esta tierra. En otras palabras, no es que lo hagas como cristiano lo que determina quién eres; sino quien tú eres determina lo que haces. Así lo dijo Pablo: Porque somos hechura Suya, creados en Cristo Jesús para hacer buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviéramos en ellas. (Efesios 2:10).

Muchos han fracasado en su caminar con Cristo porque se han preocupado más por el qué hacer, que por quién soy. Si quieres triunfar en la vida cristiana, tienes que entender tu identidad en Cristo. Es que las personas caminamos de acuerdo a la manera en que nos vemos a nosotros mismos. Es decir, si tú te consideras una mala persona, actuarás como una mala persona. Pero sí tú te ves como un hijo de Dios, quién está vivo por Cristo, comenzarás a vivir en victoria y libre tal y como Cristo vivió. Definitivamente necesitamos conocer a Dios, pero también conocer quién eres: un hijo de Dios, una nueva criatura.
Más que enfocarte en lo que debes hacer, enfócate en quién eres, en tu herencia espiritual en Cristo Jesús. ¿Cómo puedes saber si te enfocas en lo que debes hacer? Sencillo siempre te estarás preguntando: ¿Será que Dios me ama? ¿Será que soy salvo?

Cuanto tu enfoque está en quien tú eres: un hijo amado de Dios, entenderás que Satanás no puede dañar esa posición. Quizás puedas fallar, pero Satanás no puede quitarte tu posición en Cristo, porque Jesucristo mismo estará dándote la mano pidiéndote que te levantes y no peques más.

Entiende quién eres en Cristo y comenzarás a vivir como un hijo de Dios. Un pez no tiene que luchar por respirar en el agua, un árbol no tiene que luchar para crecer. Así tú como hijo de Dios, cuando entiendas tu posición en Cristo, no tendrás que ESFORZARTE por hacer todas las buenas obras para las cuáles tú fuiste hecho, estas buenas obras fluirán de ti naturalmente, porque quién tú eres ahora te pedirá que actúes de esa forma.

Así que por qué no das gracias a Dios porque te ha dado una nueva naturaleza, eres un ser diferente a quien eres, ahora eres un Hijo de Dios. ¡Así que a vivir como tal!

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