Alli Está Dios
Cuando Jacob despertó de su sueño, dijo: «Ciertamente Jehová está en este lugar, y yo no lo sabía». (Génesis 28:16)
Jacob tuvo que dejar su familia atrás después de recibir la bendición de Dios a través de su padre, Isaac. Tuvo que huir como resultado de una mala relación con su hermano Esaú, quien intentaba matarlo. Así que encontró solo y durmiendo en el desierto en un lugar llamado Betel. Fue allí donde Jacob se encontró personalmente con Dios por primera vez. Tuvo un sueño en el que vio los cielos abiertos ante él. El Señor le habló y le dio una promesa: le daría la tierra en la que él estaba.
Fue así como se pudo dar cuenta que Dios estaba allí con él, aunque ni cuenta se había dado. Dios había movido a Jacob de dónde se encontraba cómodo a fin de poder revelarse Él mismo a Jacob. Lo que comenzó como un gran problema que lo obligó a dejar su familia y sus amigos, lo llevó a tener un encuentro con el DIOS vivo y una visión fresca del propósito de Dios para su vida.
No sé porqué, pero se me hace que ya te diste cuenta que nuestras vidas en muchas ocasiones se parece a la de Jacob. Son muchas las ocasiones en las que fallamos en reconocer la presencia de DIOS en cosas tan rutinarias. Dios tuvo que sacar a Jacob de esa rutina y llevarlo a un lugar apartado de su vida e incluso quitarle sus antiguas posesiones. Ahora estaban Dios y Él, solamente; nada ni nadie podía distraerlo de ese encuentro que cambiaría su vida.
Déjame decirte que Dios, muchas veces, tiene que hacer cosas radicales en las vidas de sus siervos para los cuales tiene planes maravillosos: cosas como apartarlos de su familia, sacudirlos emocionalmente o quitarles lo que tiene físicamente, para que se encuentren solos, con Él al lado. Y puedan darse cuenta que a pesar de todo, el Señor está allí con ellos y entonces poder mostrarles la visión que tiene para ellos, mostrarles los cielos abiertos que tiene preparado para ellos.
Estás pasando por esos momentos difíciles, es hora de darte cuenta que el Señor está allí contigo y que está queriendo, al igual que lo hizo con Jacob, mostrarte los cielos abiertos que tiene preparado para ti.
Jacob tuvo que dejar su familia atrás después de recibir la bendición de Dios a través de su padre, Isaac. Tuvo que huir como resultado de una mala relación con su hermano Esaú, quien intentaba matarlo. Así que encontró solo y durmiendo en el desierto en un lugar llamado Betel. Fue allí donde Jacob se encontró personalmente con Dios por primera vez. Tuvo un sueño en el que vio los cielos abiertos ante él. El Señor le habló y le dio una promesa: le daría la tierra en la que él estaba.
Fue así como se pudo dar cuenta que Dios estaba allí con él, aunque ni cuenta se había dado. Dios había movido a Jacob de dónde se encontraba cómodo a fin de poder revelarse Él mismo a Jacob. Lo que comenzó como un gran problema que lo obligó a dejar su familia y sus amigos, lo llevó a tener un encuentro con el DIOS vivo y una visión fresca del propósito de Dios para su vida.
No sé porqué, pero se me hace que ya te diste cuenta que nuestras vidas en muchas ocasiones se parece a la de Jacob. Son muchas las ocasiones en las que fallamos en reconocer la presencia de DIOS en cosas tan rutinarias. Dios tuvo que sacar a Jacob de esa rutina y llevarlo a un lugar apartado de su vida e incluso quitarle sus antiguas posesiones. Ahora estaban Dios y Él, solamente; nada ni nadie podía distraerlo de ese encuentro que cambiaría su vida.
Déjame decirte que Dios, muchas veces, tiene que hacer cosas radicales en las vidas de sus siervos para los cuales tiene planes maravillosos: cosas como apartarlos de su familia, sacudirlos emocionalmente o quitarles lo que tiene físicamente, para que se encuentren solos, con Él al lado. Y puedan darse cuenta que a pesar de todo, el Señor está allí con ellos y entonces poder mostrarles la visión que tiene para ellos, mostrarles los cielos abiertos que tiene preparado para ellos.
Estás pasando por esos momentos difíciles, es hora de darte cuenta que el Señor está allí contigo y que está queriendo, al igual que lo hizo con Jacob, mostrarte los cielos abiertos que tiene preparado para ti.
Comentarios